lunes, 27 de julio de 2009

A Chávez y a Uribe no les creo nada.

Por: Oscar Miguel Rodao

Nuevamente los "eternos" presidentes de Colombia y Venezuela, Álvaro Uribe y Hugo Chavez, se entrelazan en una de estas interminables peleas, que curiosamente solo favorecen a ellos, esta vez por el episodio de la instalación de personal americano en las bases de Malambo, Palanquero Apiay y Bahía Málaga,

De nuevo, Hugo Chávez, calificó de "inamistosa" la instalación, por parte del gobierno colombiano, de cuatro bases militares estadounidenses, al tiempo que acusó a fuerzas militares de ese país norteamericano de crear un cerco militar desde Colombia, apoyado por la oligarquía de ese país. Mientras por el lado colombiano, según documentos oficiales de la cancillería y el Ministerio de Defensa, el acuerdo militar con Estados Unidos es "para fortalecer la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y otros delitos de carácter transnacional".

Así las cosas, justo en el momento que la popularidad de Álvaro Uribe se derrumba por cuenta de los escándalos de los falsos positivos, DMG, el referendo, la corrupción denunciada en los negocios de sus hijos, el derrumbe de la economía, la yidispolitica, las interceptaciones telefónicas a la oposición y a la falta de verdaderas políticas para combatir el desempleo y las necesidades básicas de los colombianos, como ya es tradicional, como un chaleco salvavidas salta a la escena su vecino de patio Hugo Chavez, despotricando de todo lo que se mueve de este lado de la frontera y santo remedio, jamás pudimos saber cuáles eran los aspectos negativos y las cosas que se podían mejorar del acuerdo con el gobierno americano sobre las bases militares en Colombia y adicionalmente el presidente Uribe sube como espuma en las encuestas, así esté entregando soberanía nacional a cambio tan solo de congraciarse con un nuevo gobierno americano, que lo ve como un violador de derechos humanos y con muchas sombras en su accionar político y con posiciones encontradas con relación a la idea de perpetuarse en el poder cual dictador de republica bananera.

Hugo Chaves despierta pasiones encontradas. En nuestro país son muchos, pero muchos más los que no lo quieren y consideran que todo lo que este personaje político propone es una locura o algo totalmente contrario a lo que hay que hacer, inclusive la influencia de Chávez en las decisiones de los colombianos es tan amplia y notable que tan solo con criticar o proponer algo, produce entre los colombianos el efecto contrario.

Ya algunas voces se atreven a decir que gracias a estas "oportunas" intervenciones de Hugo Chavez en la cotidianidad colombiana, el gobierno nacional se ha dado el lujo de privatizar, recortar, acabar casi todo los activos del estado, acabando con lo que era nuestro, entregando soberanía y llevando la economía a un estado lamentable sin sufrir mayor desgaste en su imagen y popularidad. Lo cierto de todo esto, es que ambos mandatarios se sirven electoral y políticamente de estas peleas y luego cuando todo está consumado los vemos a mantel tendido hablando de hermandad, integración y demás falacias para seguir engañando al pueblo. Por eso digo A Chávez y a Uribe no les creo nada.